marzo 06, 2009
febrero 22, 2009
octubre 15, 2008
agosto 23, 2008
suena, suena, suena
Cinco horas.
Suspiró, guardándose las lágrimas y la decepción, porque siempre que esperaba esa llamada... el teléfono jamás sonaba...
agosto 01, 2008
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele,
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele,
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele,
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele,
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele,
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele,
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele,
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele,
duele, duele, duele, duele, duele, duele, duele.
Duele tanto que ni pensar me deja...
julio 14, 2008
miss you
Te quiero, por eso aguanto. Te amo, por eso soy capaz de seguir de pie cuando quisiera caer y no levantarme más. Te extraño, y aunque me haga llorar, ese dolor me recuerda que sigo viva, y que pronto vas a consolarme entre tus brazos.
julio 05, 2008
Avisar no mata
Pensé que podía ser fuerte, y fallé. Que podría actuar como si me diera lo mismo porque pensé que te tendría al menos esta noche un poco más de tiempo, sólo para mí. Y fallé. De nuevo. Porque no tengo ningún derecho sobre ti. Ya lo recordé.
Y esta vez traté de ser fuerte para evitar las lágrimas, de verdad, y casi lo logro. Pero ese estúpido sentimiento en mi pecho punzó una vez más y el detonante explotó.
Albert Schweitzer